domingo, 5 de mayo de 2013

DUMBO, Greenwich Village, East Village

5 de mayo: puestos sobre aviso por un informador confidencial, nos hemos llegado al area de Brooklyn que hay alrededor de los puentes Brooklyn y Manhattan, para participar en un ritual al aire libre llamado Smorgasburg. Esta zona se llama DUMBO (acronimo de Down Under the Manhattan Bridge Overpass), y es un batiburrillo de almacenes abandonados y lofts que ya no son tan originales como cuando aprendimos esa palabra.

Salimos del metro en la estacion York Street, bajamos hacia el agua, y por las callejuelas antes de llegar a la orilla nos encontramos con la sistesis de lo que es esta parte del borough.
Promesas de un futuro mejor, pasado, eso si, por el filtro de ultramodernidad que cualquier proceso de gentrificacion requiere. Desde cualquier lugar despuntan alguno de los dos gigantescos puentes que sobrevuelan el barrio.
Y al otro lado, Manhattan. Conocen aquel que diu que lo mejor de Brooklyn son las vistas? Pues eso esta por ver. Pasamos por la libreria Powerhouse instalada en un loft (que mola un huevo, lo reconozco), y me llevo dos libros de ensayo (uno de Noam Chomsky, tambien lo reconozco).

De camino, simpatica exposicion fotografica con los actores que se disfrazan de super-heores, captados en sus quehaceres diarios. Son fotos super-chulas.
Seguimos hacia la direccion que nuestro contacto nos habia dado, y esto no es lo que me esperaba. Tobacco Warehouse, 30 Water Street. Y el tejado?
Este almacen abandonado se ha reconvertido en recinto para mercadillos y lo que se presente, bien aireado e iluminado, y con vistas directas al East River. El Smorgasburg famoso hace un juego de palabras con el barrio de Williamsburg, que es donde nacio esta tradicion, con el legendario buffet de exquisiteces suecas, y de paso meten la gracieta del programa Erasmus. Cracks!

En que se traduce esto? Pues en un mercado de comida de lo mas variopinta, a precios populares, pero con tortas por los pocos asientos libres. Menu del dia: rollitos vietnamitas con langostinos y bacon (los rollitos crudos, no fritos, y mas bien rollacos); y un hot bun de pato asado. Excelente eleccion.

Pasamos bajo el puente, tiramos hacia Brooklyn Heights, y a ver a que viene tanto alboroto con que si Brooklyn va para arriba. Pues a esto viene:


Suntuosas residencias y apartamentos construidos entre 1820 y 1870, conservadas como insectos en ambar hasta nuestros dias. El apogeo del barrio vino con la invencion de un nuevo ferry a vapor que permitia cruzar de esta antigua tierra de granjas a Wall Street sin despeinarse. A este carro se subieron banqueros y mercantes que trabajaban en la City, y que desde aqui podian al mismo tiempo mantener sus negocios y llevar una vida familiar alejada de la locura de Manhattan. Conciliacion se le llama ahora a esta figura.

Al borde occidental de esta barriada hay un paseo con una vista gloriosa de Governor's Island, Ellis Island, la estatua de la Libertad y Downtown.
Tal que una cosa asi ven los vecinos de este lado cuando se asoman al balcon. Por la mañana, el sol que sale por detras ilumina los rascacielos reflejando mil colores, y por la tarde ese mismo sol te da de lleno mientras te tomas otra Brooklyn Lager. Malditos vividores!

Se me olvida mencionar que hoy era el Five Boro Biking Tour, 40 millas por los cinco distritos, y que han estado circulando cicllistas ininterrumpidamente desde que llegamos.

Bajamos hacia el puente Brooklyn para coger el East River Ferry direccion Pier 11, Downtown. Cuesta 4 dolares, y en pispas te ves al otro lado del rio (que en realidad no es rio). Como muestra de gratitud a Manhattan por las fabulosas vistas, que da Brooklyn a cambio? Pues una cosa como esta:
Parece Filadelfia, no?

Bajamos para coger el bus 20, ya que nuestra intencion es llegar al Greenwich Village, seguramente el mejor sitio del mundo para pasar una tarde de domingo. Nos apeamos en la calle Hudson con Christopher, vamos deambulando por alli, y esto es vida! Asi todo tiene sentido, que los peces salieran de los mares, aprendieran a reptar, criaran, pelo, plumas, echaran a volar, construyeran puentes y se ejercitaran en calculo integral, todo eso ha conducido a este estilo de vida de las terracitas, las tabernitas (con v si son griegas), el perrear al sol de la tarde, y prepararse para la noche. Que puede estar movidita.
Uno de los barrios mas traumatizado por el 9/11 fue Tribeca, donde las torres gemelas se habian convertido en una parte consustancial del paisaje, y hasta una referencia para orientarse por sus callejuelas. El Memorial marcha a buen ritmo, hace dos dias instalaron la cupula/antena, y tambien desde el Village se puede hacer el jubilado y observar como trabajan los albañiles. Con prismaticos, eso si.
No hace falta mirar lejos para ver buena arquitectura, esta parte de Manhattan, que fue creciendo a su rollo, como tantas otras, esta sembrada de joyas.

Llegamos al Jefferson Market Garden, donde nos encontramos con un jardincito de tulipanes, que pueden poner al Keukenhof to shame.
Subimos hacia la calle 14, a vista del Chelsea Market, y repetimos el trayecto en bus hacia Union Square. Brujuleamos un poco por el East Village, pero la desgana nos puede, y nos vamos orillando camino del metro en Astor Place. Sin comerlo ni beberlo nos encontramos con St Marks in the Bowery, posiblemente la iglesia mas antigua de Nueva York. Construida por Petrus Stuyvesant (nacido Pieter, pero como aprendio latin...), mayor y ultimo Director de la Compañia Holandesa hasta que los echaron en 1664, que se hizo durante su tiempo en el cargo con una parcelita del tamaño del East Village entero, y que fue transmitiendose por sus descendientes. Ah, este Stuyvesant, despues de entregar Manhattan sin disparar un tiro, fue llamado a rendir cuentas a Holanda, vio, conto, y regreso a New York para un retiro dorado. Pelillos a la mar...

A finales del XVIII, y anticipandose a un boom inmobiliario, se urbanizaron la parcela con una cuadricula rectangular de calles, aunque pocos años despues el alcalde DeWitt Clinton les apisono esa cuadricula con una de diseño propio, que es la que da forma al Manhattan de hoy en dia (The Grid, rechace imitaciones). Esta cuadricula triunfante esta alineada con el eje fisico de la isla, y como deferencia al linaje de los Stuyvesant despues de arrastrarlos por el fango, les permitieron mantener una calle de su antigua cuadricula. Se trata, claro esta, de la calle Stuyvesant, y es que encima hubiese quedado muy feo girarles esta calle en particular, ya que la iglesia se hubiese quedado descolocada. Tanto iglesia como cuadricula estaban orientadas con el norte, no con la isla. Miren el mapa de abajo del todo y lo comprobaran.












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